Nota general: |
En páginas posteriores, en la sección explicativa de los grabados, podemos obtener la siguiente explicación referente a la imagen: “Con este mismo asunto mitológico, se conoce un célebre fresco de Rafael de Urbino que decora una de las famosas cámaras del Vaticano. Aunque aquel fresco es una gran composición de gusto y estilo clásico, es fría en el colorido lo mismo que en las figuras. Este lienzo de Mantegna, por el contrario, está perfectamente ceñido a la leyenda de la fábula griega, desprendiéndose de todas sus figuras ejecutadas con nobleza, elegancia y corrección, un sutil encanto pagano. En primer término el Pegaso – que hizo brotar de una patada, en el Parnaso, la fuente de Hipocrene – y luego, delante del trono que ocupan Apolo y Venus, las Musas que festejan a la madre del amor y al padre de la harmonía”. Es por ello, que para hacer honor a este último, Apolo, observamos en la esquina inferior izquierda a un personaje sentado que ejecuta la lira, acompañando la danza de las Musas. |